7 de Marzo de 2017
Al final el blog tiende más a hablar de series anime y de videojuegos. Me cuesta más hablar de las películas porque no veo demasiadas y me es más complicado sacarles "materia" al ser bastante más cortas. Con los libros soy extremadamente lento leyéndolos, así que suelo estar al día (Solo tengo un libro pendiente del que hablar).
Pero bueno, supongo que está bien siempre que hable de lo que me apetezca y de lo que sepa que voy a aportar algo de información.
La entrada de hoy irá sobre Ao no Exorcist, Blue Exorcist en inglés, un anime shonen cortito, de unos 25 capítulos. Aunque se podría decir que acabó, su segunda temporada parece estar en emisión. Más abajo explicaré qué pasa con esto.
De momento, me basta con aclarar que esta entrada va exclusivamente sobre la primera temporada. Será algo más cortita de lo normal, pero eso no tiene importancia.
Sin spoilers, para variar
La historia gira en torno a Rin, un joven que vive en un orfanato junto a su hermano gemelo Yukio. No tardará en descubrir que por su sangre corre sangre demoníaca pues es en realidad el hijo del rey de los demonios: Satanás.
Para alcanzar el poder suficiente para desafiar y derrotar a su padre, Rin ingresa en una escuela especial en la que desarrollará sus dotes como exorcista.
Ao no Exorcist es un anime del género Shonen, que hace referencia a un público objetivo adolescente y que suele narrar historias centradas en la superación, las batallas y sin apenas contenido explícito. Tiene su origen en el manga de Kazue Katō, una historia de acción y fantasía basada en lo sobrenatural, en un universo en el que nuestro mundo, Assiah, es uno de los dos planos existentes, mientras que el otro, Gehena, es el hogar de los demonios.
En este marco, Rin, hijo de Satanás, entrenará sus habilidades para acabar con su padre.
Pero vayamos por partes.
Lo más sencillo, quizá por mi falta de experiencia al respecto y lo poco que puedo detallar, es hablar sobre la animación.
Ao no Exorcist cuenta con 25 episodios, y sus recursos son los habituales en un anime promedio del género. La animación es buena, sin ahorrar en acciones, aunque tampoco destaca dentro del anime.
Los colores usados funcionan correctamente tanto en el ambiente de la ciudad como en el de la academia (que aún no he mencionado), pero pecan de ser bastante genéricos en las que precisamente son las escenas más tópicas de la historia.
En cuanto a la banda sonora... no la recuerdo mucho, la verdad. Los temas en sí funcionan, pero no es una música que llegue a destacar demasiado. Tampoco tiene una personalidad tan marcada como gustaría. Sí hay algún tema mejor que destaca en sus momentos, pero en general es una banda sonora olvidable.
Un par de ejemplos:
Vamos ya con la trama y su narración, que es el punto más llamativo.
Cuando empezamos a ver la serie, vemos que la historia en torno a Rin se desarrolla rápidamente. Ocurren sucesos importantes que marcan la historia y que tienen gran importancia.
En los dos, tres primeros capítulos, el receptor pensará estar ante uno de los animes más intensos e interesantes del género shonen. Sin embargo, a partir de la llegada a la escuela de exorcistas, el formato cambia radicalmente, y el ritmo de la serie pasa a capítulos casi autoconclusivos y desarrollos mucho más lentos y pausados. Y así se mantiene hasta el final, cuando el ritmo vuelve a ser muy rápido e intenso. El hecho de que la serie sea lenta durante su mayor extensión pero ocurra rápido en los momentos más importantes del inicio y el final hace que su narración sea poco sólida e incoherente.
Este cambio tan radical del desarrollo es, a mi gusto, el mayor error de la serie, y tiene como consecuencia que los momentos más importantes ocurran demasiado rápido para ser digeridos. No es que me parezca mal que una serie vaya rápido, ni que tenga un desarrollo pausado, pero lo que no está bien es que la serie alterne entre ambos de esta manera tan poco natural.
Por otro lado, la parte intermedia de la serie, la del desarrollo lento, es mucho más típica. El inicio en la ciudad, con los demonios y el monasterio es más propia, pero, ¿cuántas veces hemos visto a un protagonista de shonen desarrollar sus habilidades en una escuela?
En este punto, que domina casi toda la serie, esta se vuelva menos original, al tiempo que, como he dicho, se pausa. Y encima, este fragmento ocupa la inmensa mayoría de la historia, haciendo que la calidad y el interés de Ao no Exorcist recaiga enormemente.
Tengo que decir una cosa sobre el final, relacionado con lo que he comentado antes de empezar sobre que la trama había terminado, pero que habría una segunda temporada. Lo que ocurrió en Ao no Exorcist fue algo que hemos visto miles de veces en este mundo: un anime comienza a adaptar un manga, lo adelanta y recurre a inventarse el resto. A veces el resultado de esto no está tan mal (Algunas sagas de relleno de Naruto o One Piece o la recta final de Full Metal Alchemist, por ejemplo), y de hecho el final de Ao no Exorcist no estaba mal, aunque ocurría de una forma muy precipitada.
En realidad, el final inventado de la serie no era especialmente cerrado, y podía continuarse con una segunda temporada, pero según tengo entendido, lo que va a ocurrir con la segunda temporada es que va a continuar con lo que el manga inventó. Tal vez lo adapten para continuar con lo que se inventó, o tal vez hagan caso omiso a esa parte. Ya veremos.
Este final tenía también el problema de que los personajes secundarios carecían, en su mayoría, de importancia.
No he hablado todavía de los personajes, que es lo que me queda esta vez.
El protagonista, Rin, es... el típico protagonista de shonen, básicamente. No sigue la estela de Goku, Luffy o Naruto (otro tipo de protagonista cliché), sino que se trata del personaje serio a ratos, pero insolente, que se enfada a menudo, leal a sus amigos... y por supuesto, posee unos poderes especiales que tiene que aprender a controlar, en este caso los de Satanás. En fin, el típico insolente malo en los estudios. Como personaje funciona, pero es bastante poco original.
Su hermano gemelo, Yukio, es bastante mejor personaje, al menos en mi opinión. A diferencia de su hermano, Yukio no posee los poderes de Satanás y ha llegado a ser profesor gracias a su esfuerzo y entrenamiento. Es más tranquilo que su hermano, capaz de ser un profesor amable pero también puede ser serio y diligente si la situación lo requiere. En la clase de Rin hay varios alumnos, como suele ser habitual en las escuelas de los animes. De entre todos los alumnos, el que más destaca es Bon. En apariencia y comportamiento es el "tipo duro" de la clase, pero es también el prodigio de la clase. Tiene sus objetivos claros y se esfuerza por ellos. Ese contraste es su aspecto más destacado, aunque luego tiene una relación con Rin de rivalidad, la clásica rivalidad, en este caso llevada bastante bien.
Hay muchos más personajes, pero aunque no voy a hablar de todos, no puedo irme sin mencionar al enigmático Mephisto Pheles, el director de la escuela de exorcistas. Su personalidad estridente y su papel en la historia, en el que nunca tenemos claro si se trata de un aliado, un enemigo o simplemente un personaje neutro, lo convierten a mi gusto en un personaje fantástico y sin duda en el mejor de Ao no Exorcist.
Así que, concluyendo:
Como shonen no está mal, pero su desarrollo es desordenado. Sus personajes funcionan, así como su historia, pero se concentra en el inicio y el final y se rellena con un desarrollo más pausado en su mayor extensión.
¿Merece la pena verla? A mi gusto, es entretenido pero bastante olvidable, está bien pero nunca llega a destacar especialmente.
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