Madan no Ou to Vanadis

martes, 2 de octubre de 2018
2 de Octubre de 2018

Hoy regreso con otro de esos casos en los que veo una serie por puro azar.
Supongo que fue la temática medieval lo que me llamó la atención de esta serie, que de lejos no tenía mala pinta, y el azar lo que me condujo a empezarla.

Los resultados de hacer esto no siempre son buenos, como es razonable.

Sin spoilers


La guerra ha estallado en Zchted. Tigrevurmud, alias "Tigre", señor de una pequeña región llamada Alsace se embarca en una cruenta batalla contra el ejército de una de las doncellas de la guerra, llamadas Vanadis, Eleonora Viltaria.
Incapaz de ganar, la batalla da un giro drástico y Tigre y Eleonora se embarcan juntos en la guerra contra el causante de la temible guerra que asola toda la región.





Madan no Ou to Vanadis es un anime de 13 episodios ambientado en un mundo de fantasía medieval europea. Es un anime de aventura y fantasía... y Ecchi, mucho Ecchi.
Entre dragones y guerreros legendarios destacan las siete Vanadis o doncellas guerreras, con un poder tan desmesurado que el grueso de los ejércitos no son más que carne de cañón.

Y es que la serie tiene mucho de eso. De un modo bastante "épico" que emula a otras series como Ataque a los Titanes o One Piece, Madan no Ou to Vanadis explica las estrategias seguidas en combate, cómo va la guerra, como avanzan los ejércitos... Eso a primera vista es algo positivo, pero a la hora de la verdad es totalmente inútil, pues las batallas se reducen entre un uno contra uno entre las Vanadis de turno.
A pesar de tener estas explicaciones, la serie tiene huecos argumentales a tutiplén. Muchas cosas no se explican o se dejan al aire, mientras la seriedad se balancea entre el drama y el humor absurdo. Para que os hagáis una idea, un combate se define de forma dramática, mostrando las muertes de cientos de soldados, mientras las Vanadis combaten a muerte... hasta que se caen mejor, se dan un apretón de manos y todos contentos. Menos los cientos de muertos, pero esos a nadie le importan.
Por eso todas esas explicaciones se quedan en nada, mientras las batallas se quedan prácticamente en nada. Veremos un ejemplo nada más empezar la serie, cuando la Vanadis protagonista entra en combate con el personaje principal, Tigre, y acaba tomándolo prisionero. Tigre pasa a ser un aliado a las mínimas de cambio y todas las muertes se perdonan como si nunca hubieran ocurrido.

Vamos, que la consistencia argumental es prácticamente nula.
Eso no quiere decir que a ratos no pueda ser entretenida. Las batallas y tal, si uno no presta atención a los excesivos huecos argumentales, son entretenidas. Aunque no mucho más que eso.


Los personajes no ayudan a mejorar nada. El protagonista, Tigre, es la cosa más tópica que se puede tener como protagonista. Eleonora, el segundo personaje más importante, tres cuartos de lo mismo. El resto de personajes se ajustan a los tópicos de este tipo de series: Tenemos a la mujer inocentona, a la doncella que adora a su señor, a la tsundere repelente de turno...
Y, por supuesto, la serie las utiliza como harén personal de Tigre, para dar lugar a mil escenas subidas de tono que no aportan absolutamente nada a la serie salvo vergüenza ajena.
Este Ecchi llega al punto de mostrarnos a Eleonora bañándose al aire libre, totalmente desnuda y solo cubierta por su cabello. A ratos casi parece un hentai.
Pondría una imagen que lo dice todo, pero paso de meter esa clase de contenido en mi blog. En su lugar pondré la escena Ecchi más tópica de la historia del anime:


El caso es que cualquier razón absurda vale para meter manoseo de tetas, desnudos y demás en la serie. Creo que de los trece capítulos, como mucho un par se salvan de este tipo de escenas.
Bastante lamentable, la verdad.

Supongo que después de decir eso al lector no le quedarán muchas ganas de ver la serie. O puede que sea el tipo de interesado en estas cosas, quién sabe.
Que la serie sea así en ese aspecto no significa para nada que todo en ella esté mal.

La animación es bastante competente. Aunque recurre al 3D como es habitual en animes modernos que incluyen guerras con centenares de soldados, el resultado final luce algo por encima de la media del género.
No se puede hablar tan bien del diseño de personajes, que es aburrido en el caso de los chicos, y exagerado en las chicas. Supongo que imaginaréis a qué clase de exageración me refiero.


Y esta imagen no representa casi nada. Los abdómenes expuestos, los pechos gigantes y los escotes no son nada. Hay personajes que llevan ropas absurdas. Por favor, si la tsundere de turno lleva una falda transparente...
En fin, que la serie en general es técnicamente buena, pero nada más.

En cuanto a la banda sonora... Voy a ser directo. Es una pena, es verdaderamente una pena que una serie tan mediocre como esta tenga una banda sonora tan buena.
El encargado de componerla es Masaru Yokoyama, compositor de animes como Your Lie in April, que como ya comenté tenía una banda sonora preciosa. Junto a Nobuaki Nobusawa hacen un trabajo excelente.
La banda sonora es excelente, con temas preciosos y otros muy dinámicos.
Os pongo un ejemplo:


Y solo puedo poner uno porque YouTube ha marginado bastante la banda sonora de esta serie. Hay un vídeo de más duración que contiene la banda sonora completa, por si tenéis curiosidad.
En fin, que ojalá esta banda sonora hubiera ido a parar a una serie mejor.

Así que así queda la cosa: Madan no Ou to Vanadis puede ser entretenida gracias a sus escenas de acción y a su maravillosa banda sonora, pero es una serie mediocre, llena de huecos argumentales, personajes planos y escenas subidas de tono fuera de lugar.

Yo, por mi parte, no recomiendo verla.

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